Deporte Balear

La mirada de Casas

Área de Comunicación
El entrenador del ViveMenorca pasa revista a la primera vuelta del equipo balear haciendo hincapié en lo conseguido hasta el momento y los grandes retos que están por venir desde un punto de vista global.

La realidad de la competición nos sitúa en una posición correcta para nuestro objetivo.

Hemos conseguido una importante regularidad en la parcela defensiva.

Si un jugador tiene posición debe tirar el error es no atreverse a mirar al aro.

Para el técnico catalán no hay que perder la perspectiva ni la globalidad y «aunque yo soy el primero que quiere dar un paso adelante en los resultados de este equipo» afirma «la realidad de la competición nos demuestra que al término de la primera vuelta estamos en una posición correcta. Con un poco de suerte podríamos tener alguna victoria más pero aún queda mucha liga por delante y las segundas vueltas generalmente no tienen nada que ver con las primeras»

Destaca en el rendimiento colectivo de este grupo «la defensa. Las veces que hemos podido desarrollarla hemos demostrado que podemos competir ante cualquier rival. Creo que hemos conseguido una importante regularidad en esta faceta y eso es lo que debemos seguir potenciando porque es la base de los buenos resultados». Mientras que en el debe del grupo apunta «la irregularidad mental. Cuando no hemos sido capaces de ser sólidos en este aspecto nos ha costado mucho competir»

Aunque considera importante analizar el tránsito de este equipo la mejor Liga de Europa con los condicionantes que le han acompañado. Por ejemplo la pequeña «deserción» de Vrbica Stefanov, un jugador clave en la estructura del equipo a la hora de ser confeccionado «por minutos no iba a tener una presencia extraordinaria pero si de calidad ya que, primero en verano cuando se viajó hasta Macedonia para hablar con él y, posteriormente a su llegada, le dejamos claro cual iba a ser su rol en el equipo. Tenía que desempeñar una labor clave de generador en momentos muy importantes de los partidos y lo así lo aceptó. Posteriormente tuvo una serie de condicionantes personales y de propias sensaciones que le llevaron a pensar que no podía desarrollar ese trabajo. El problema es que su marcha dejó un hueco en el equipo de exterior con pelota en tierra que no se ha cubierto y que ha llevado al resto a realizar un sobreesfuerzo».

Esa necesidad de ir al límite para competir después «acaba pasando factura porque los jugadores no pueden ir en todos los partidos al 120% y acaban desgastándose. Además en las posiciones exteriores hemos tenido que padecer las lesiones puntuales de Ivanov y Marc Fernández lo que nos ha obligado a jugar prácticamente con tres aleros y eso desgasta produciendo situaciones como los últimos partidos de Mario Stojic». El capitán es un fijo en las preferencias de Casas porque «su implicación es siempre total. Ahora no vamos a dudar de quién es Mario Stojic. Lo que tenemos que hacer es ayudarle y apoyarle porque confiamos en él»

En pocos meses el club ha vivido momentos plácidos y otros complicdos pero Casas mantiene que «la presión que hemos sufrido nunca ha sido superior a la que nos ponemos nosotros mismos por lo que estas situaciones, que son normales en el deporte profesional, hay que vivirlas con naturalidad»

El técnico sigue prolongando su idilio con una isla que le cautivó desde su desembarco en Menorca: «estoy muy bien aquí y mi único objetivo es darlo todo como profesional y devolver a la afición y a la gente el cariño y confianza que me ha dado desde que llegué»

Esa implicación con el proyecto hace que Casas se haya convertido en un icono deportivo en Menorca y que tenga muy claros los pasos a dar para que el proyecto siga creciendo «debemos seguir trabajando con los pies en el suelo, quemando etapas y asegurando en casa los partidos con la implicación trabajo de todos: jugadores, técnicos, afición, medios de comunicación… Después fuera de casa hay que ser inteligentes, jugar con mayor relajación y saber leer las situaciones de los rivales para lograr sumar cuantas más victorias mejor»

No vacila en ninguna de sus respuestas, una característica que ha mantenido hasta en los momentos más complicados ya que «el entrenador no puede tener dudas». Con la misma seguridad rebate a quien acuse a los jugadores de cometer errores en la selección de tiro de los últimos encuentros propiciando bajos porcentajes de acierto ya que «cuando un tirador tiene posición y no anota no comete un error, el error sería no tirar cuando hay una situación clara de lanzamiento. hemos de ser valientes y reconocer que los jugadores son los mismos que nos han hecho saltar de alegría y los que consiguieron otros muchos récords positivo en estos años de ACB»

Por eso Casas apuesta por sus jugadores al tiempo que se retira hasta sus oficinas en las entrañas del «Pavelló» Menorca, un templo del basket que espera con calma la oportunidad de volver a rugir tras el pequeños exilio de encuentros adomicilio que padece el ViveMenorca en un complicado mes de enero. La afición tiene subrayado en rojo el jueves22 de enero día que su equipo afronta su nueva final en casa ante el Iurbentia Bilbao, un partido que hará revivir las mágicas sensaciones de guerra deportiva en Bintaufa.

Informa: deportebalear.com / fuente:menorcabasquet.com

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