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El Valeriano Allés se despide de la CEV Cup al caer en Polonia ante el Tauron MKS, tras plantar cara en los dos primeros sets. La baja de Janine Sandell y el saque local, principales escollos

El Valeriano Allés se despidió ayer de Europa con un ‘hasta luego’ más optimista que nunca. Las bermellonas acusaron en exceso la baja de Janine Sandell, así como el cargado mes de enero que han tenido y que ha desencadenado en dos finales tristes en apenas dos semanas. Primero la Copa de la Reina y ayer, la CEV Cup. El Tauron MKS Dabrowa Gornicza sudó más de lo previsto ante un Valeriano Allés guerrero, que vendió cara su piel en los dos primeros juegos, para ceder luego con menos oposición en el 2-1 y el 3-1.
Ni los 20 puntos de Vyta Prychepa, jugando por ‘4’, ni los 13 tantos de Correa fueron suficientes ante unas polacas mejor físicamente.

El Valeriano Allés tomó la iniciativa en el primer set en un partido que desde el primer momento estuvo muy igualado. 3-4, primero, y 6-8 después para llegar al primer tiempo técnico con ventaja. Reaccionó el equipo local entonces de la mano de Straz y de la mala recepción bermellona. Las chicas de Chema Rodríguez estuvieron más acertadas en el saque, lo que le permitió no perder la cara nunca en el primer asalto. Las locales se desperezaron y con un 4-0 se marcharon al 12-9, cuando Chema Rodríguez solicitó tiempo muerto. La distancia se mantuvo, llegando al segundo tiempo técnico con un 16-13 favorable al Tauron.

Los dos conjuntos concedían muy pocos fallos y un volei de gran calidad, rápido y vistoso, con un intercambio de posesiones digno de una competición europea. El Valeriano Allés logró igualar el set en el tramo final (18-18, 21-21) y vio cómo la fortuna se aliaba con las polacas en el 23-21 después de salvar dos balones envenenados, en un punto de bella factura y que la fortuna decantó del lado local al caer un balón a la red en cancha del Valeriano (25-23).

En el segundo, de nuevo el Valeriano Allés llevó la iniciativa, sumando los dos primeros puntos, pero vio cómo las locales se rehacían con fuerza con un 6-0 (6-2), y se llevaban el primer tiempo técnico (8-4). Entonces surgió la figura de la americana Kaylie Atherstone, desde el saque, para guiar a las suyas con un 0-5, incluido un punto de saque directo, que les puso por delante en el marcador (10-11) y que obligó a Kawka Waldemar a pedir tiempo. La igualdad se mantuvo en el electrónico hasta el final del set, más largo de lo habitual.

El equipo de Chema logró salvar cinco bolas de set hasta que se llegó al 29-29, donde dos puntos de Vyta Pryechepa, y un bloqueo, en la red devolvieron la igualdad al tanteo, 29-31 y 1-1.

Tras la reacción bermellona llegó la decepción. El 5-4 inicial mantuvo esperanzada a la afición bermellona que siguió el partido a través de internet pero una serie de errores permitieron una primera ventaja (16-9), que posteriormente costaría el set, después de que el bloqueo menguara sus prestaciones y tras una tímida reacción ciutadellenca (25-16).

El último cuarto lo abrió el Tauron con un 6-1 que hizo presagiar lo peor. Las locales frenaron cualquier aportación bermellona en ataque y el varapalo más duro se lo llevó la ‘12’ local, Zebrowska, que, tras una bronca de su entrenador, saltó a la pista llorando. La bronca surtió el efecto deseado y la jugadora llegó hasta los 24 puntos. El Valeriano Allés cedió el set y con ello el partido, y el triste final se consumó (25-16) y 3-1.

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