Deporte Balear

Las derrotas este fin de semana de los dos principales estandartes de la Sociedad Deportiva Portmany –el equipo Regional y el juvenil de Liga Nacional– restaron esplendor a una jornada festiva para el club que preside Juan José Forneri. Con 89 años de historia y una de las mayores fábricas de futbolistas de las Pitiüses (más de 400 miembros entre técnicos y jugadores), la familia portmanyina se vistió este domingo con sus mejores galas para expresar el sentimiento al escudo en el Municipal de Sant Antoni.
No fue la mañana ideal tras las mencionadas derrotas, pero la jornada sirvió para estrechar lazos y, por qué no, para compartir la suculenta paella que disfrutaron 300 comensales en el Passeig de ses Fonts.
El Portmany se encuentra en pleno proceso de reinvención tras un primer tramo liguero marcado por las destituciones de Juan Parra y Guillamó para dar la batuta de la vanguardia rojilla a hombres como Vicent Fernández, Maymó, Nacho Andrés o Santa. El objetivo: volver a ser el referente en la máxima competición insular y mantener al colectivo juvenil en categoría autonómica.
«Tenemos las máximas aspiraciones con el primer equipo, dentro de esa lucha que tenemos con los dos grandes ‘cocos’ de la regional. También es prioridad mantener la categoría con el juvenil nacional y luego seguir trabajando con la cantera. El club está consiguiendo recuperar la estabilidad porque, a pesar de que a nivel deportivo ha habido problemas, como entidad seguimos estando muy bien y trabajando de forma fantástica con la base», indica el máximo responsable de una entidad que puede presumir de exportar futbolistas a grandes clubes nacionales. «Para nosotros quiere decir que estamos trabajando bien», concluye Forneri, el capitán de una nave que pretende enderezar su rumbo.

Garantes del futuro
Una veintena de técnicos titulados forman a más de un centenar de niños

La SD Portmany comenzó su andadura en septiembre de 1923 gracias a la iniciativa de su primer presidente, Blas Perelló Bonet. Su trayectoria en el fútbol insular ha venido avalada por sólidos cimientos, y es que si de algo puede presumir la entidad rojilla es de la calidad que atesora su cantera. No en vano, algunas de las grandes figuras ibicencas, como Marcos García, salieron de la fábrica portmanyina. Actualmente, perlas rojillas como el juvenil Marc Fraile o el infantil Eliazar Zamudio ya saben lo que es escuchar cantos de sirena de ‘grandes’ como el Villarreal , el Atlético de Madrid o el Betis.
La mayoría de divisiones inferiores lucha cada temporada por el título en sus respectivas categorías. El Portmany es un referente no solo por su potente cantera sino por la veintena de entrenadores titulados que velan por su progresión deportiva y humana. Técnicos y jóvenes valores son los principales garantes de un futuro prometedor para el club más laureado de las Pitiüses.