Deporte Balear

A sus 26 años, la atleta ibicenca ya suma dos títulos nacionales y se marca como objetivo participar en el Campeonato del Mundo el próximo agosto | Su entorno destaca su capacidad de sacrificio y no duda en que mejorará su plusmarca en los 800 metros: 2´04´´32

Esta chica puede correr en dos minutos». Ese pensamiento se cruzó como un rayo por las cabezas de Héctor Carmona, Nuria Fernández y Guillermo Ferrero la primera vez que vieron trotar en una pista de atletismo a Khadija Rahmouni El Alami. La marca no es simbólica cuando se habita en el 800 femenino. En tiempos parecidos se han decidido las finales de los últimos campeonatos internacionales. Para muestra, un botón: la rusa Maria Savinova ganó el oro olímpico en Londres´12 con 1´56´´19; para conquistar el mundial en Daegu´11 invirtió 1´55´´87, y para hacerse con el europeo en Barcelona´10, 1´58´´22.

Los 2´04´´32 que acredita Rahmouni como plusmarca al aire libre están a un mundo de distancia de la eslava que domina actualmente su prueba. Sin embargo, Carmona (su novio y también atleta), Fernández (una de sus mejores amigas dentro del mundo del atletismo y campeona de Europa de 1.500) y Ferrero (su técnico actual en Madrid) creen que su intuición se hará realidad más pronto que tarde. «Cuando llevas mucho tiempo en este mundo aprendes a fijarte en los detalles. Khadija me sorprendió desde el primer momento. Su manera de levantar el pie del suelo, la zancada, ese final increíble que tiene…», argumenta Fernández, que a sus 36 años ha hecho un paréntesis en su trayectoria para ser madre por segunda vez.

Íntima de Rahmouni lejos del tartán, la mediofondista que se alzara hace dos años y medio con el oro continental en Barcelona guarda una peripecia vital con cierto paralelismo a la de la ibicenca. Es hija de madrileños que emigraron a Suiza y nació en Lucerna en 1976. «No volvimos a España hasta que tuve unos cuatro años», recuerda. La cuarta de seis hermanos, Jadi vino al mundo diez años después en Chefchauen (Marruecos) y en 1989, siendo una niña, se instaló en Eivissa junto a su familia.

En la isla, Khadija echó raíces y se convirtió en una vilera más. De cualidades innatas para el oficio de correr, pronto se la vio en carreras populares. Su primer club fue el Club Atletisme Eivissa, desde donde saltó al CA Pitiús. «Se integró muy rápido, hizo un grupo de amigos muy fuerte gracias al atletismo y aprendió el catalán perfectamente», comenta Toni Roig, su entrenador en aquella época, un mentor con el que todavía guarda muy buena relación, pese a que tuvieron «algunos desencuentros». «Más de una vez me ha dicho que le encantaría volver a vivir aquí algún día», incide Roig.

Ferrero –que tutela a Rahmouni desde hace un par de años, cuando se deshizo el grupo que integraba la mediofondista, comandado por Manuel Pascua– coincide con el pitiuso en destacar «la capacidad de sacrificio» de la actual campeona de España al aire libre y en pista cubierta: «Es de las que siempre da el máximo cuando entrena, pero mejora a la hora de competir».

Una atleta que se crece
Roig afirma que el nivel de Rahmouni sube al «125% cuando acude a un gran campeonato». Fernández eleva esas capacidades «casi al 200%». Carmona, al que conoció en Guadalajara en 2007 y con el que mantiene una relación, no duda en afirmar que Khadija posee «una inteligencia brutal a la hora de correr una prueba de exigencia». «El domingo, desde la grada de Sabadell, cuando faltaba una vuelta no tenía dudas de que cogería a Élian Périz y se llevaría el Campeonato de España», reflexiona Héctor, que coincide con Fernández en destacar «la inteligencia que tiene para leer las carreras». «No es nada fácil saber cuándo tienes que atacar y cómo colocarte en las pruebas de mediofondo. Ella lo hace a la perfección», destaca la medallista continental, que quiere cerrar su periplo deportivo en el país que la vio nacer disputando el Europeo en Zúrich la próxima temporada 2014. «Tengo mucha fe en que Jadi esté allí también. Ahora es la ´jefa´ del 800 femenino en España y le ha llegado el momento de dar el salto internacional», afirma. Para ello, Rahmouni y Ferrero tienen ocho meses para lograr la marca (2´01´´50) que da acceso al Campeonato del Mundo. ¿Será Moscú, sede del evento en agosto, la plaza donde Khadija confirme al mundo entero que nació para correr en dos minutos (o menos) los 800 metros?

La campeona, a fondo

TRABAJO
Una persona capaz de buscarse la vida pese a cualquier dificultad
Pese a sus oros, los recortes la dejan sin beca. Complementa sus ingresos con otros trabajos como masajista, modelo y dependienta.

PERSONALIDAD
Un carácter fuerte que disfruta escuchando a los demás
Los que la conocen destacan que «comprende muy bien los problemas de los demás» y, que además de ser «muy fiel», posee un carácter «fuerte, igual que en la pista».

AFICIONES
Amante de la música ´house´ y de aprovechar cada minuto
Le gusta bailar las mezclas que compone su novio, que también es dj. Es de las que para poco por casa, vive cada minuto.

PALMARÉS
Desde que se nacionalizó, su ascensión ha sido imparable
Los éxitos a nivel estatal de Khadija Rahmouni llegaron cuando consiguió la nacionalidad española, obstáculo que lastró la carrera de otros compatriotas suyos que pasaron por el CA Pitiús. En 2005, se proclamó campeona de España júnior. Tres temporadas después, ya en Madrid después de una breve estancia en Galicia a las órdenes de Mariano Verdugo, hizo el doblete en los nacionales promesa. La adaptación a la edad sénior fue dura, pero los éxitos llegaron: en 2011 fue bronce en el estatal al aire libre; en 2012, oro, y 2013 puede ser el curso de su confirmación a los 26 años.

fuente:.diariodeibiza.es

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