Deporte Balear

CV Eivissa y Ushuaïa sellan su patrocinio para la próxima temporada en una rueda de prensa en la que Escandell vuelve 
a reclamar al Ejecutivo que pague la subvención del año pasado «La relación con Palma no existe», se lamentó el presidente

Fue media hora de charla con los medios de comunicación en la que el vóley y la economía pelearon codo con codo por aparecer más veces en boca de Javier Escandell, Juanan Ripoll, Mariano Esteban, Mario Oliva y Abel y Carmen Matutes Prats. El deporte de la pelota y la red debía ser la corista del acto. No en vano, era el beneficiario del acuerdo que firmaron ayer el Club Voleibol Eivissa y Ushuaïa y que alarga oficialmente una temporada más el patrocinio entre el establecimiento turístico de los Matutes y la entidad que preside Escandell. Pero las cifras, los euros que faltan (unos 50.000) para iniciar sin deudas el próximo ejercicio, se colaron inevitablemente en las grabadoras de los periodistas citados en la sede del hotel de Platja d’en Bossa.

Y el sufrimiento que han provocado (tensión, angustia, horas sin dormir, «muchas reuniones para seguir adelante», como afirmó el propio Escandell) en el seno del conjunto amarillo se notaba en el tono de voz del máximo mandatario de los de Es Viver, ese hombre de optimismo desenfrenado que ayer sorprendió ante los micrófonos con un discurso mucho más pausado de lo habitual. Casi pensado. La prosodia se sosegó, pero a cambio se trufó de recados al Govern balear, quien, por encima de los partidos que están por jugar en la que será la segunda campaña de los ibicencos en Superliga, se llevó el protagonismo de la comparecencia.

«Ellos [el Ejecutivo autonómico] saben que existimos, tienen nuestros teléfonos. Somos un equipo masculino de primera división y estamos en Eivissa. Es un relación complicada [con el Govern]… bueno, no existe. Seguimos sin conocer lo que nos van a dar por la temporada que ya ha acabado. Es muy complicado cuadrar un presupuesto cuando haces un trabajo y no cobras». Crudo. Rotundo. Tajante. Así disparó Javier Escandell cuando se le preguntó por el organismo que preside José Ramón Bauzá.

Mutismo de Morente y Delgado
¿Ese resentimiento con el Consolat de Mar es gratuito? No, su coste son los «fondos prometidos que no han llegado», como señaló Abel Matutes Prats. Porque el club sigue tachando días en el calendario sin saber a cuánto ascenderá la subvención de la Fundació de l’Esport Balear. Algo que, tal y como le aseguró la pasada primavera Javier Morente, director general de Deportes, a Escandell tendría que haberse conocido en abril. Desde el CV Eivissa siguen sin noticias de Mallorca. Lo último, que las bases de esa línea de ayudas se aprobaron en junio y que las cantidades deberían haber visto la luz hace unas semanas. Sin embargo, el mutismo continúa. Y, para más inri, la conselleria que dirige Carlos Delgado no abona los 8.000 euros que siguen bailando del ejercicio 2010/2011 –los de Gino disputaron entonces la FEV; categoría que ahora suena a prehistórica, después de que la Federación Española la suprimiera en 2012.

«Habíamos llegado a un acuerdo con ellos para dos años [con el condicionante de la permanencia], pero hemos entendido que les hacía falta más esfuerzo nuestro. Lo que hicieron [para cumplir con la mayor parte de los pagos, quedan pendientes los sueldos de los jugadores locales y del técnico] fue titánico. No se puede repetir». Ese fue el capote verbal que le echó ayer Matutes Prats –que esbozó una sonrisa cuando Escandell explicó de manera irónica los pocos estímulos que recibe desde el Govern– al club que esponsoriza. El económico, además de la cantidad en líquido que abonará a las cuentas del Eivissa, se ampliará con incentivos.

Ayuda en la campaña de socios , alojamiento gratuito para los fichajes foráneos (ahorro de casi 20.000 euros), camisetas (unas 2.000)… «Empujoncitos», como los define Escandell, que se suman a la fiesta a beneficio del club que se celebrará en Ushuaïa antes de que concluya la estación turística.

Una fiesta para cuadrar números
Será en sábado, estará dentro del ciclo de Ants, uno de los eventos por los que ha apostado el hotel este verano, y se quiere hacer coincidir con la primera jornada de Superliga (5 ó 9 de octubre serían dos posibles fechas). Según ha podido saber Es Diari, las entradas costarán entre 15 y 20 euros y la totalidad de la taquilla irá a las arcas del equipo. Reunir a un par de miles de personas significaría tapar los 25.000 euros que el CV Eivissa tiene descubiertos en su partida de gastos. Esa cantidad se multiplicaría si el Govern vuelve a jugar al gato y al ratón en la 2013/2014: el balance que maneja la directiva cuenta con otros 50.000 euros a recibir de Palma en el curso venidero. Los amarillos creen que se los merecen por méritos deportivos. Que los perciban o no ya será otra historia.

El apartado deportivo: Esteban sigue, Sollet se marcha y se buscan punta y colocador
El 2 de septiembre comenzará a sudar la plantilla que comandará el argentino Toni Gino Corona un año más (y ya irán seis con el CV Eivissa). Será la segunda incursión del Ushuaïa Ibiza Voley en la élite y, visto el éxito del debut, la intención es cambiar pocas cosas. Así lo reafirmó ayer Juanan Ripoll. El director técnico apenas ha tenido tiempo para ponerse con la plantilla. En junio y julio, desconocía los recursos con los que contaría mientras lidiaba con diapositivas y ‘dossieres’, presentando a viejos y nuevos ‘sponsors’ (además de Ushuaïa, el club dispone de media docena de apoyos privados) el impacto en los medios de patrocinar al que fue club revelación de la pasada Superliga. Ahora toca coger el teléfono y tomarse un café con excompañeros –fue colocador hasta la 2010/2011– para fichar y renovar.

Habrá dos novedades. Una para suplir a Carlos Mora y otra para sustituir a Valentín Sollet, que ha decidido no continuar. Ese receptor no será el sabadellense Gerard Osorio, campeón de la Copa Príncipe con Palencia en Eivissa (invierno de 2011) y que marcha a Lyon para curtirse en la potente liga francesa. Mientras se sondea el mercado, ayer se confirmó que Mariano Esteban jugará «al menos» un año más. Motivación y orgullo tiene el capitán, igual que Mario Oliva, que quiere seguir, pero todavía debe ponerse de acuerdo con el club. Su situación es calcada a la del resto de pitiusos, que desean cobrar sus nóminas para continuar. Los foráneos (Fidalgo, Guerrero, Costa y Borges) tienen intención de renovar, a no ser que acaben por dejarse tentar por alguna de las ofertas extranjeras que han recibido. De momento, el trato familiar que reciben en el CV Eivissa pesa más que los euros italianos, galos o polacos.

Informa: DeporteBalear.com. Fuente: diariodeibiza.es

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