Deporte Balear

Cerdà se reunió ayer jueves con Serra Ferrer y, sorprendentemente, le dijo que pelillos a la mar, que todo había sido una sucesión de malentendidos y que debían seguir remando juntos. Por supuesto no le salió bien. El accionista minoritario conferido por obra y gracia de un contrato de sindicación absurdo con poderes dignos de Luis XIV, el Rey Sol, está a punto de acabar como uno de sus sucesores en el trono de Francia, Luis XVI. Cerdà se siente atrapado, ve que ha llegado demasiado lejos y que se encuentra en un callejón sin salida. Por eso recula y, sólo seis días después de emitir un comunicado en el que descalificaba abiertamente a Serra y le conminaba a someter a juicio del Consejo todas las decisiones deportivas, ahora pretende dar marcha atrás y que todo vuelva a ser como antes. Con todo el Consejo en contra, con toda la afición en contra y con todo el club en contra, salvo por supuesto los múltiples servicios externos que ha contratado, casi todos ellos con empresas de Barcelona, su mandato está a punto de tocar a su fin. Quizás la próxima semana haya noticias al respecto.

Informa: Deporte Balear fuente: futbol desde mallorca