Deporte Balear

El Espanya Hoquei Club disputará la final del playoff por el título tras vencer al Club Patinaje en Línea Valladolid (CPLV) Mozo-Grau en un encuentro que se decidió después de dos prórrogas y dos tandas de penaltis y que pasará a la historia como uno de los mejores partidos del hockey línea nacional.

El segundo encuentro de la semifinal del playoff por el título de liga comenzó como lo suelen hacer los partidos entre el Espanya y el CPLV, con mucha tensión e intensidad. Los pucelanos saltaron al parquet muy agresivos y dispuestos a dejarse la piel para forzar un tercer encuentro. Sin embargo, fue el Espanya quien tomó la delantera en el marcador con un gol de Jean Paul Bejarano.

Con el 1-0, el Espanya parecía tener las riendas del partido, pero entonces apareció Nathan Sigmund para complicarle las cosas al conjunto mallorquín como ya hizo en el partido de ida en Valladolid. El entrenador-jugador estadounidense del CPLV empató el partido y puso en el electrónico el 1-1 con el que se llegaría al descanso.

En la segunda parte, con el marcador igualado, tocaba empezar de cero. Los dos equipos buscaron un gol con insistencia y fueron los visitantes quienes lo encontraron por mediación de Sigmund.

El CPLV se ponía por delante y los nervios empezaron a aparecer en las gradas del Joan Seguí, que no dejaron de animar a los jugadores del Espanya hasta que el capitán Albert Tomàs consiguió el empate cuando quedaban menos de cuatro minutos para el final.

La alegría inundó la pista de Son Rapinya pero no duró mucho, ya que tan solo un minuto después se volvió a adelantar el CPLV. El gol de Sigmund, la bestia negra del Espanya en esta eliminatoria, cayó como un jarro de agua fría para los jugadores y la afición, que veían que las cosas se complicaban y mucho cuando ya se entraba en la recta final del partido.

Poco después de que se pusiera el puck en juego de nuevo, apareció un rayo de esperanza para el conjunto de Pau Seguí con la expulsión del visitante Rubén Herrero. Con tres jugadores en pista del Valladolid, el Espanya sustituyó al portero para meter un quinto jugador de campo y jugárselo todo para evitar tener que disputar otro partido. Iban pasando los segundos y el CPLV aguantaba los ataques de los locales pero, justo cuando ya parecia imposible, cuando sólo faltaban nueve segundos para el final, Albert Tomàs empató el partido.

La euforia se apoderó de los jugadores y la afición tras el empate in extremis. El Espanya había conseguido forzar el gol de oro en el último suspiro y tenía una nueva oportunidad para ganar el partido.

Tras dos emocionantes prórrogas de cinco minutos, el marcador no se movió y sólo quedaba una manera de resolver el partido: los penaltis.

A cada equipo le tocaba lanzar cuatro penaltis y la tensión era máxima. Si anotaba el CPLV, lo hacía el Espanya y si Martin Antala paraba un penalti para los locales, también lo hacía Markus Pippo para los visitantes. Y así, hasta forzar otra tanda al acabar la primera empatados a dos goles.

Con empate a uno en la segunda ronda, el portero del Espanya, Martin Antala, detuvo el tercer lanzamiento del CPLV y, seguidamente, Iván Mesa no desaprovechó su oportunidad y marcó para ganar el partido y clasificar al conjunto palmesano para la final del playoff por la Liga Élite.

El rival en la final será el HC Rubí Cent Patins y la ida se disputará en Palma el día 3 de mayo. “La probabilidad de ganar es de un 50-50. Tenemos el factor campo fuera de casa, pero les hemos ganado una vez allí y lo podemos volver a hacer”, aseguró un emocionado Pau Seguí después de ganar al CPLV.

Pilar Seguí para Deportebalear.com (Fotos de Lorenzo Salom, Lauren Pacus)

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