EBE continúa imparable (76-64)

22 marzo 2009 | Por Redacción | Categoria: Baloncesto

Sancho Lyttle lanza a canasta ante la mirada de dos jugadoras del Gran Canaria.  VICENT MARI

SANTA EULÀRIA | GUSTAVO L. SIRVENT El EBE Ibiza PDV ha puesto la velocidad de crucero y no hay quien le pare, a pesar de que su entrenador, Jordi Fernández, tenía mucho respeto al rival de ayer, Gran Canaria, que poco pudo hacer ante la superioridad de las ibicencas. El plantel de Santa Eulària sigue con la quinta marcha que puso en la Copa de la Reina y parece no tener fin. Ayer, el equipo se dio un merecido homenaje junto a su afición, que respondió a la llamada del subcampeón copero y pobló las gradas del Municipal.
Las santaeulalienses apuestan por un baloncesto dinámico en ataque, bien elaborado cuando es estático y veloz jugando en contraataque. Además, la defensa ha mejorado respecto a la primera vuelta y es sólida y asfixiante, como demuestra que el colista de la competición se ahogara agotando la posesión de balón en muchas jugadas.
El buen juego local dio la primera brecha en el electrónico (12-3, m.3), que encontró una de las pocas respuestas de su adversario con un 0-7 de parcial (12-10, m.5). Antes, los árbitros se cebaron con Sancho Lyttle y la cargaron con dos faltas incomprensibles para el reglamento. Pero el Puig d´en Valls no quería sorpresas y su ataque en equipo le dio 13 puntos de renta en un abrir y cerrar de ojos (25-12, m.9). Perovanovic fue la única capaz de mantener a las suyas. Un triple estratosférico de Pee Wee Johnson cerró el cuarto 29-19.
En el segundo parcial, Mingo Díaz ordenó una zona 2-3 para intentar frenar al quinteto pitiuso, que de nada le sirvió porque jugando con solidez y con Lyttle en el banco por tres faltas, el PDV consiguió una máxima renta de 16 puntos (43-27, m.19). Antes hubo cuatro ataques consecutivos fallados de las de Fernández, al igual que su oponente. Al descanso se llegó 43-30.
Tras el entreacto, el subcampeón de Copa aumentó su intensidad defensiva y ahí no encontró oposición porque Gran Canaria se movía a golpes de inspiración de Kresovic o Halman. La máxima diferencia hasta ese momento llegó en el 28 con un canasta de Pirsic (61-43). Díaz paró el choque con un tiempo muerto, pero de nada le valió.
La manga definitiva sirvió para que el EBE practicara su defensa flex, para que debutaran en Liga las jugadoras del Tanit Jessica Kellogg y Romina Pesante y para mantener rentas. El cuadro canario sólo logró maquillar el choque en los instantes finales.

Informa: Deporte Balear //fuente:  diariodeibiza

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