3-1. Golpe de autoridad del Atlético Isleño, que se hace fuerte en el liderato

17 abril 2011 | Por Redacción | Categoria: Fútbol
Atletico Isleño

El Atlético Isleño dio un golpe encima de la mesa y noqueó al Portmany, equipo que ha dilapidado muchas de sus opciones de hacerse con el título. El equipo de Pepe Arabí, que gobierna la Preferente con 9 puntos, ganó porque simplemente fue mejor que su rival. Los corsarios de Can Misses hundieron la nave portmanyista con tres cañonazos de Joan Planells, Xavi Toledo y Edu Orduña, pero pudieron enchufar alguno más. El cuadro de San Antonio se ahogó en el terreno de juego. Nunca halló el modo de penetrar en la férrea muralla ibicenca y sólo un hombre, Puet, encontró el gol, aunque en claro fuera de juego. Lo peor del choque fue la lesión de rodilla de Curuné, que tuvo que se trasladado al hospital en ambulancia.

El Atlético Isleño suma y sigue. Tercer partido, tercera victoria. El equipo de Can Misses continúa lanzado en la liguilla y pasa a liderar la clasificación con mano de hierro. El grupo de Pepe Arabí sabía que una victoria ante el Portmany le daba medio billete hacia el título. La consigna era clara en el vestuario azulón. Había que sumar los tres puntos. Y a por el triunfo saltaron los corsarios al campo de batalla. Los primeros minutos fueron disputados. El visitante Samir probaba fortuna por el flanco izquierdo, pero sus pases no encontraron rematador. En el bando local, mientras tanto, Xavi Toledo y Edu Orduña esperaban una oportunidad en la punta del ataque. Reinó el respeto y las precauciones de unos y otros. Había mucho en juego. El primer aviso serio del Atlético Isleño acabó en gol. En el minuto 32, Troya se prestó a lanzar una falta al corazón del área. Cristian, el portero visitante, se quedó a media salida y el balón cayó sin dueño cerca de la portería. Joan Planells, a placer, remachó el cuero a la red. 1-0.
El tanto propició nervios y ansiedad en el Portmany, que no encajó el golpe. En el campo se respiró tensión y el juego se convirtió bronco en muchos momentos. El equipo de Javier Tristán, que vio el encuentro desde la grada (fue expulsado la jornada anterior), no llegaba a puerta. El Atlético Isleño, bien plantado, asfixió a su oponente, que nucna se encontró cómodo. Los de Pepe Arabí nunca perdieron de vista el marco portmanyista y, a falta de un minuto para el final del primer acto, llegó el segundo mazazo. Xavi Toledo ramató a gol dentro del área tras una espectacular asistencia de Edu Orduña, uno de los mejores hombres del duelo y uno de los jugadoress más destacados del torneo. 2-0. El Portmany, tocado y hundido. En el descanso, se comentaba en la grada que los de San Antonio lo tenían muy difícil para arreglar el resultado.
El Portmany sacó toda su artillería en la segunda parte. Entró Oliva y el ex del San Rafael B dispuso de la primera gran ocasión de su equipo. En el 46, disparó dentro del área e Iván Gallardo despejó a córner. El colectivo sanantoniense se apoderó del balón y encerró al Atlético Isleño, pero en los últimos metros se desvanecía su juego. No mordía y los locales defendían sin apuros buscando una contra que matase el partido. Y ésta llegó en el 52. Troya atrapó un balón en el centro del campo y después de una jugada por la banda izquierda asistió a Edu Orduña, que no perdonó y estableció el 3-0. Xiqui , lesionado, vio el gol tumbado en el campo porque nadie, ni sus propios compañeros, tiraron el balón fuera.
El Portmany estaba muerto. Tres goles eran muchos y faltaba mucha gasolina para remontar el choque. Las contras del Atlético Isleño eran dinamita pura y en el 60, Vega tuvo en sus botas el cuarto de la tarde. El conjunto rojijllo, desquiciado, quiso, pero no pudo y el juego entró en una dinámica tensa, de combate y pierna dura.
El bloque de Javier Tristán encontró la portería rival en el 63. Santa colgó una falta y Puet, en fuera de juego, cabeceó de espaldas. 3-1.
Toni Troya, en el 69, probó fortuna y en el 84, la zaga local sacó de la misma línea de gol un remate de Puet. En los últimos minutos, Curuné, en una acción con Roberto Robles, se lesionó de gravedad. El defensa gritaba de dolor en el césped. Se temía lo peor. Posiblemente, se haya roto los ligamentos de su rodilla derecha. Fue una de las peores noticias de un partido que acabó con tres disparos más de Atlético Isleño y la ambulancia en el terreno de juego. Juanan y Edu Orduña, que vio como su segundo chut acabó en el poste, estuvieron muy cerca de sonrojar a un Portmany que pierde fuelle y que muy bien lo tiene que hacer en esta segunda vuelta para aspirar al título.

Futbol Pitiuso

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