Deporte Balear

SEBASTIÁN CANDELA | IBIZA El Portmany juvenil necesita ganar el derbi de mañana si quiere salvarse. Al equipo de Sant Antoni le queda un calendario sumamente complicado porque en las nueve jornadas que quedan por jugarse tiene que jugar contra los cinco primeros clasificados de la

Liga y el Sant Jordi será el primero de ellos que pondrá a prueba a un Portmany que ha ganado los dos últimos partidos que ha disputado y que tiene que demostrar ahora si los dos triunfos han sido fruto de la suerte o la casualidad o si, por el contrario, estamos ante un Portmany más motivado y mucho más fuerte capaz de ganar al Sant Jordi y salir definitivamente del pozo de la tabla clasificatoria.

Los técnicos Nacho Andrés y Vicente Costa Maymó disponen de toda la plantilla para afrontar este derbi tan comprometido para ambos clubes.

El Sant Jordi también se juega mucho en el envite. Si pierde el encuentro perderá también muchas opciones de luchar por el ascenso a la División de Honor juvenil. Por lo tanto, necesita los puntos tanto o más que el Portmany, pero los verdinegros están crecidos tras vencer en la última jornada a su rival directo Menorca y llegan a Sant Antoni muy motivados y también plenamente convencidos de que pueden ganar los tres puntos de oro que hay en juego.

Otra ventaja que tienen los del Sant Jordi es que ya han jugado contra los mejores equipos de la categoría y han saldado estos encuentros positivamente, por lo que les quedan los más asequibles en la recta final del campeonato y el Portmany es, en teoría, uno de ellos.

David Torres volverá al banquillo tras cumplir su partido de sanción y tiene a toda la plantilla a su disposición, salvo el lesionado Iván.

Parte médico
Los médicos dan el alta al delantero Turé
Turé superó la prueba de esfuerzo que realizó el pasado miércoles y los doctores le han dado de alta médica, por lo que el delantero, que lleva marcados cinco goles en la Liga, podría jugar mañana en Sant Antoni. «Todo ha quedado en un susto», declaró ayer su entrenador David Torres, que reconoció que al jugador no le habían detectado ninguna patología.

L.V.     Diario de Ibiza