Deporte Balear

Este incidente me parece de importancia capital para juzgar lo que podemos esperar de alguien que aspira a ser máximo accionista del Mallorca, sobre todo porque delata comportamientos muy reveladores.

Ayer os conté de pasada el conflicto existentre entre Utz Claassen y Reinhold Fanz, ex-entrenador del Hannover durante la breve etapa de Claasen como presidente, y os ofrecí la versión del entorno del propio consejero del Mallorca. Hoy creo que es justo escuchar a la otra parte, para que cada uno extraiga sus propias conclusiones.

Al parecer todo nace cuando Claassen decide despedir a Franz Gerber, manager general del Hannover. Reinhold Fanz, entrenador del primer equipo y amigo personal de Gerber, efectúa unas manifestaciones públicas en las que acusa a Claassen de carecer de conocimientos futbolísticos. La respuesta del directivo alemán es llevarle a tribunales (¿de qué me suena eso?), donde a Fanz se le prohíbe volver a hablar en esos términos de Claassen.

Hasta aquí, todo relativamente normal. Lo que ya no lo es tanto es lo que sucedió varios años más tarde, cuando en diciembre de 2.004 Fanz es nombrado entrenador del Karlsruhe. No permaneció demasiado tiempo en el cargo, porque el cuatro de enero de 2.005, sin haber dirigido ni un solo partido, fue destituido por la directiva. Es importante destacar que en aquella época el patrocinador principal del Karlsruhe era la compañía energética EnBW, cuyo jefe de operaciones era Utz Claassen.

Ahí es dónde difieren las dos versiones. Según la de Claassen, cuando la directiva del Karlsruhe fue informada sobre las diferencias existentes en el pasado entre Fanz y el máximo dirigente de su patrocinador, optaron por cesar de inmediato al entrenador, en una decisión tomada sin la participación de Claassen. Sin embargo, el entorno de Fanz asegura que fue Claassen el que pidió su despido, amenazando incluso al club con retirar el patrocinio de EnBW.

Una vez más nos encontramos ante una situación similar al conflicto que mantienen Serra y Cladera con Claassen. A la espera de lo que decidan los tribunales, es la palabra de uno contra la de otro. Si es cierta la versión de Claassen, no hay nada que decir. Ahora bien, si resulta que amenazó al Karlsruhe con retirarle el patrocinio si no cesaba al entrenador eso ya es mucho más grave, porque manifiesta una intolerable injerencia deportiva teniendo en cuenta que Claasen no era ni siquiera directivo del club.

Informa: Deporte Balear  fuente:    futbol desde mallorca.com

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