Deporte Balear

La celebración de los jugadores y técnicos del Bàsquet Mallorca, también con el mítico Juan Domingo de la Cruz que bajó desde la grada, dejaba bien a las claras la importancia del triunfo conseguido en Logroño. El cuadro inquer se asegura la permanencia deportiva. Y lo hace a lo grande, con una victoria en la pista de un aspirante a disputar el ‘play off’ por el título.

Los pupilos de Xavi Sastre se trabajaron el partido, lo trataron de llevar a su terreno desde el primer momento y acabaron por desquiciar a un Knet & Éniac irreconocible, en el que no brillaron sus habituales referentes, Mathew Witt y Olaseni Lawal. Tampoco Bivià, el mejor jugador del BM, estuvo a su nivel habitual. Pero el trabajo conjunto, honrado y sincero de los mallorquines encontró recompensa.

Pronto, el Bàsquet Mallorca avisó de sus intenciones. Dos de sus tres primeras canastas fueron triples, lo que ya condicionó en cierta medida la defensa local. Quizá esa circunstancia propició el nerviosismo en los jugadores del Knet & Éniac, que no encontraban la manera de imponer su habitual ritmo de juego. Amador y Miki García castigaban el aro rival y dominaban su canasta.

El rebote también era patrimonio del Mallorca, porque en las filas riojanas Lawal estaba desaparecido. Por todo ello, Jesús Sala se vio obligado a pedir tiempo muerto para reordenar las ideas entre sus jugadores.

El equipo de Xavi Sastre siguió a lo suyo, intentándolo desde la línea de tres puntos y reboteando con fuerza. Pero lo de los tiros triples fue una obsesión porque abusó en exceso y por momentos daba vida al Knet riojano. La segunda falta cometida por Bivià en el primer cuarto también le dejaba sin timón sobre la pista. Tampoco lo supo aprovechar el equipo logroñés pese a que dos triples de Galarreta y Zagorac abrían el partido tras el descanso.

► Más de lo mismo

Los mallorquines volvieron en la segunda parte a su baloncesto discontinuo, pero eficaz. Miki García, ahora en solitario porque Amador perdió fuelle, se erigió en protagonista para poner en ventaja a su equipo, que llegó a tener siete puntos (43-50). Un triple de Quique Suárez y una canasta de Herrero relanzaban a los locales (59-55), pero en estas apareció Marques para, con un estilo poco ortodoxo, eso sí, percutir una y otra vez el aro local. El Knet & Éniac estaba perdido, apático por momentos, y enfrente el Bàsquet Mallorca aprovechó la circunstancia para ir cobrando pequeñas ventajas que al final fueron suficientes para alejar el fantasma del play-out y pasar de nuevo la patata caliente a la directiva. Ya han cumplido deportivamente. Categoría atada en cualquiera de los casos en la pista. Ahora, les toca a los ‘otros’ el currarse el tema económico. O quizás ya sea demasiado tarde para ello.

KNET & ÉNIAC 76 (22+13+19+22): Witt (9), Ruíz de Galarreta (12), Bonds (6), Mejeris (3) y Lawal (11); Mediano (5), Arevalo (7), García (0), Herrero (2), Zagorac (10) y Suárez (11).
BÀSQUET  MALLORCA 80 (23+14+18+25): Bivià (12), Justo (12), Green (6), Amador (14) y García (18); Marques (14), Toper (3), Cabot (0) y Markovic (1).

ÁRBITROS:  Martínez y González. Sin eliminados por personales.
INCIDENCIAS: partido correspondiente a la trigesimoprimera jornada de la Liga LEB Oro disputado en el Palacio de los Deportes de La Rioja antes unos 1.100 espectadores.

Texto y fotos: Fotoprens / El Correo.com  (de Óscar Solorzano)

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