Deporte Balear

El uruguayo remonta un 0-3 con dos goles y una asistencia en una media hora prodigiosa

Corría el minuto 65 de partido cuando Gregorio Manzano decidió dar entrada a Pierre Webó y a Gonzalo Castro. Al técnico andaluz ya no le quedaba más remedio que jugarse el todo por el todo. Su equipo perdía 0-3 y el Betis vivía un partido plácido mientras esperaba a que el árbitro pitara el final. Y en esas apareció un futbolista del que casi nadie esperaba nada.
En apenas media hora el ´Chori´ Castro revolucionó el apelmazado ataque rojillo y construyó la igualada con dos goles y una asistencia que materizalizó Webó ante la perpleja afición de Son Moix. Castro reclamó para sí todo el protagonismo un año y medio después de que el Mallorca desembolsara por él cuatro millones de euros al Nacional de Montevideo.
El ´Chori´ empezó su particular exhibición a los siete minutos de saltar al campo. Recogió un balón perdido en el borde del área grande y fusiló de un zurdazo al meta Ricardo. Era su primer gol en Liga esta temporada, pero apenas lo celebró. Ni él ni sus compañeros, porque a falta de veinte minutos para la conclusión la igualada parecía una quimera.
Dos minutos después Jurado metió un centro en el área. El uruguayo controló y cedió atrás para que Webó anotara el segundo de la tarde. El camerunés corrió después a abrazarse con Castro en señal de reconocimiento por haberle fabricado la mitad del gol. El Mallorca empezó entonces a creer en la remontada.
Ya era oficial. El ´Chori´ se había unido al grupo de futbolistas ´resucitados´ que en esta segunda vuelta se han propuesto enmendar errores pasados y conducir al Mallorca a la consecución de la permanencia. El sudamericano asumió el protagonismo que ya tuvo el miércoles en el partido de la Copa del Rey ante el Barcelona, en el que marcó el gol mallorquinista y provocó el penalti que frustró Martí.
Castro está en estado de gracia y la grada sabía que el empate pasaría necesariamente por sus botas. El sudamericano avisó con un disparo seco y duro que sacó Ricardo con una mano milagrosa. Pero no tardó en tener la réplica. A falta de diez minutos para la conclusión y en plena descomposición bética, Castro protagonizó una doble pared con Webó que acabó con el balón en la red. Fue su segundo gol del partido. Y el segundo en la Liga.
Con sus dos últimas actuaciones, el centrocampista sudamericano ha presentado candidatura para relevar en las bandas a Arango o Varela, los dos extremos que siguen con su particular via crucis esta temporada. Uno de los fiascos más sonados de la secretaría técnica va camino de convertirse en el revulsivo de este último tramo liguero.

Informa: Deporte Balear fuente: diariodemallorca.es

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